Oriente Medio
Egipto
¡Mágico! Así definimos una de los países con una cultura de más de 5.000 años de historia.
Qué mejor forma de conocer Egipto que navegando por las aguas de río Nilo. Un viaje que os hará descubrir una de las más antiguas civilizaciones del mundo. El templo de Karnak, las pirámides de Giza, Abu Simbel, cientos de monumentos que hacen de este increíble país Patrimonio de la Humanidad.
Os sorprenderá el bullicio de sus calles y bazares, las delicias de su gastronomía y la amabilidad de sus gentes.
Una experiencia que hay que vivir, al menos, una vez en la vida. Y si sois amantes del snorkel o submarinismo, os proponemos disfrutar de unos días de descanso en las playas del Mar Rojo. Bucead entre cientos de peces de vivos colores en Hurghada o Sharm El Sheikh.
¿No os parece un plan perfecto?
Emiratos Árabes
Descubrid el contraste entre el exótico sabor oriental y la arquitectura más moderna. Un viaje a través de las viejas tradiciones unido a la opulencia de los lugares más ricos y lujosos del mundo.
La Ciudad Dorada de Dubái os permite acercarnos a una aventura en el desierto a través de sus sinuosas dunas, pero también a sus mezquitas, palacios y bullicioso zoco.
En Abu Dhabi los modernos y gigantescos rascacielos de cristal se entremezclan con los suntuosos palacios orientales.
¡Un viaje de contrastes que no nos dejará indiferentes!
Turquía
Turquía, la puerta hacia Asia, es sin duda un país lleno de riquezas que descubrir.
Deleitaros con el encanto y la siempre vibrante ciudad de Estambul, pasando por los paisajes volcánicos de Capadocia, disfrutando de los mágicos «castillos de algodón» de Pammukale o los restos arqueológicos de Éfeso.
Como broche final tendréis la posibilidad de recorrer en goleta la bella Costa del Egeo y bañaros en sus hermosas calas.
¡Preparad las maletas!
Jordania
Si queréis sentiros como Lawrence de Arabia en pleno desierto, Jordania es vuestro destino.
Dejaros seducir por enclaves bíblicos como el Monte Nebo, el insólito mar Muerto, el desierto de Wadi Rum donde podréis dormir bajo las estrellas. Y por supuesto, considerada una de las maravillas del mundo; Petra; un lugar imprescindible para visitar al menos una vez en la vida.
¿Qué más se puede pedir?
